Impacto de la Ola Invernal en Colombia 2011

La ola invernal en Colombia es uno de los principales problemas en la actualidad para nuestro país, debido a la gran cantidad de damnificados que existen en la actualidad por obra de la inclemente naturaleza que escudada bajo el ‘fenomeno de la Niña’ a logrado llevarse todo por delante.

Como consecuencia, las exportaciones del sector agrícola sentirán en toda su magnitud los efectos del invierno que tiene anegada cerca de un millón de hectáreas productivas, situación que se traducirá en menores ingresos por 900 millones de dólares.

Los departamentos más afectados son Bolivar, Magdalena y Atlantico, seguidos por Guajira y Cordoba. Según se a logrado identificar en el momento, la cifra alcanzada por los daños de la naturaleza alcanzan los 168.000 millones de pesos, una cantidad de dinero impresionante pero que aún no logra mostrar la verdadera magnitud causada para los damnificados del invierno en Colombia.

Como plan de choque, el Gobierno Nacional ha expedido una serie de normas, resaltando la Directiva Presidencia No 4 en donde se establece un mecanismo alternativo que permita el acceso a los instrumentos financieros y fitosanitarios de manera inmediata a los productores del sector agropecuario.

Se registra la expedición de los decretos expedidos en el marco de la Emergencia Social.

D. 4828 de 2010 Medidas en materia de instrumentos de financiamiento para la recuperación de la capacidad productiva e instrumentos para la atención sanitaria y fitosanitaria.

Medidas en relación con los Distritos de Riego.
D. 125 de 2011 Medidas en materia de Reforestación
D. 126 de 2011 Riegos y seguros.
D. 141 de 2011 Modifica la estructura de la Corporaciones Autónomas Regionales.
Res 01 de 2011 Reglamenta el programa de alivio a la deuda agropecuaria a afectados por el fenómeno de la niña
Res 02 de 2011 Línea especial de crédito para recuperación de la actividad productiva para afectados por el fenómeno ICR Especial y FAG especial

Despues de la Ola Invernal, se debe pensar en la recuperación de la capacidad productiva de los predios afectados, más allá de la entrega de recursos. Esto sería mediante: planes de saneamiento y recuperación de suelos, asistencia técnica, entre otros.
El sector en su conjunto debe iniciar inmediatamente los programas de prevención, adaptación y mitigación frente al cambio climático.

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